Fin de semana largo lleno de acontecimientos. Alfredo de Angelis y sus bloqueadores de caminos (podría ser el nombre de una banda, tranquilamente) fueron demorados unos 20 o 25 minutos, en otra muestra que el kirchnerismo ha pasado de su fase leninista-revolucionaria a su etapa stalinista-totalitaria: Hace bien Buzzi en decir que es "aberrante". No se puede criminalizar la protesta social. Claro que no.
La selección jugó con Ecuador y, una vez más, mostró que tener un espantapájaros en el banco sirve menos que tener un director técnico. Empate sufrido contra un equipo de medio pelo (como los que abundan en el vecindario), aún cuando las individualidades debían ser suficiente. Ahora tocará Brasil y, según vemos acá, vamos con un planteo ultra-ofensivo: parafraseando a la campaña de Adidas podemos decir "el ficus + 1". Y bue, por algo en este blog las expectativas son muy módicas al momento de pensar en choques con equipos reales, en instancias decisivas. ¿Por qué? Porque entonces tirar unos cortes de carne sobre las brasas y servirse unos whiscachos resultará un planteo insuficiente.
Algunos se fueron a Rosario a conmemorar los 80 años del Che. Pero el asunto, cuya repercusión no iba a ser notoria, fue relegado a la insignificancia por el ajetreto del escenario político.
Los Piojos regalaron otro ritual, uno más, en el teatro mítico de Buenos Aires. Luca, único, no podía estar ausente: no sólo La Rubia Tarada, sino también ese Disco baby disco! de Debede marcaron puntos altísimos de otra noche inenarrable.
Cerramos este intenso recorrido con otra entrega de Kitsch TV. ¿Qué más se le podía pedir a un fin de semana largo?
La selección jugó con Ecuador y, una vez más, mostró que tener un espantapájaros en el banco sirve menos que tener un director técnico. Empate sufrido contra un equipo de medio pelo (como los que abundan en el vecindario), aún cuando las individualidades debían ser suficiente. Ahora tocará Brasil y, según vemos acá, vamos con un planteo ultra-ofensivo: parafraseando a la campaña de Adidas podemos decir "el ficus + 1". Y bue, por algo en este blog las expectativas son muy módicas al momento de pensar en choques con equipos reales, en instancias decisivas. ¿Por qué? Porque entonces tirar unos cortes de carne sobre las brasas y servirse unos whiscachos resultará un planteo insuficiente.
Algunos se fueron a Rosario a conmemorar los 80 años del Che. Pero el asunto, cuya repercusión no iba a ser notoria, fue relegado a la insignificancia por el ajetreto del escenario político.
Los Piojos regalaron otro ritual, uno más, en el teatro mítico de Buenos Aires. Luca, único, no podía estar ausente: no sólo La Rubia Tarada, sino también ese Disco baby disco! de Debede marcaron puntos altísimos de otra noche inenarrable.
Cerramos este intenso recorrido con otra entrega de Kitsch TV. ¿Qué más se le podía pedir a un fin de semana largo?
2 comentarios:
Debo confesarlo:
Le afane sin ningún tipo de culpa aquello de "Alfredo De Ángellis y sus bloqueadores de ruta es un nombre bárbara para una banda de rock".
¿Los Piojos? ¿Y esos quiénes son?
AUnque son mis vecinos de partido y me caen bien dentro de todo, basta ver este video y se van las dudas:
http://www.youtube.com/watch?v=K1tIMfxGzUg
¿Le puedo preguntar su opinión sobre la mítica-y a mi entender absoltuamente estéril- rivalidad entre Soda y los Redó?
Saludos Cnel.
Ese tema, esa versión, Pappo ahí dirigiendo toda la orquesta. Monumental.
Esa rivalidad me pasa por el costado. No me interesa. Hoy me gustan más los Redondos, pero escucho ambas bandas; algún tiempo prefería Soda. Quizás dentro de unos meses vuelva a cambiar.
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